Formado por un equipo de más de veinte personas, es un elemento imprescindible para la clínica, y constituye el núcleo del equipo de investigación. Se encarga de buscar soluciones a los problemas detectados en la práctica clínica. Muchas de las soluciones clínicas que se aplican a los pacientes actualmente en forma de nuevos productos y técnicas, encontraron respuesta gracias a ellos.